Cuando veas el éxito de alguien, debes pensar que detrás de éste hay un largo historial de fracasos.
Si quieres encontrar una inspiración para crecer, mira en tu interior.
Cuando toques algo, cuando algo te deslumbre con su belleza, no olvides sentirlo en tu corazón.
Cada oportunidad que no tomas es un fracaso seguro.
El miedo es el más despiadado ladrón de sueños.
Pueden despojarte de todo lo material, pero nunca dejes que se lleven tu sueño de volver a empezar.
Antes de lanzarte a conseguir tus metas, asegúrate de que las tienes bien claras.
Si crees que es imposible fracasar, tendrás éxito.
Que la valentía te sirva para ir en pos de tus sueños.
Un anhelo es la semilla de un sueño y un sueño es la semilla de un logro.
Es preciso perder el control un poco para poder encontrar nuestro propio centro.
Cuando dos caminos se presenten ante ti, no caigas en la trampa de tomar el más transitado.
Tus oportunidades para ser exitoso están dentro de tu propia voluntad.
Encuentra tu propósito en la vida y vivirás con un sentido bien marcado.
Lo que piensas es sinónimo de lo que logras.
No importa si ganas, lo que te mantendrá en carrera son las ganas de querer ganar.
No te conviertas en el resultado de las circunstancias, sino en el producto final de tus propias decisiones.
Todo en la vida tiene su momento; no hay fracasos, sino postergaciones del éxito.
Cada vez que tu motivación decaiga, renuévala pensando en el resultado de tus futuros logros.
Para comenzar a ser feliz, no necesitas más que lo que tienes.
Cuando el temor a tu propio miedo te impide vivir tus sueños, estás en verdaderos problemas.
Cuando la mente ya no te dé más motivación, recurre a tu imaginación.
Puedes ir lento, incluso puedes hacer un alto en el camino, pero siempre ten delante tus metas y vuelve a encaminarte a ellas.
Cuando estamos de acuerdo con alguien, confirmamos que nuestras ideas van por buen camino; Ahora es cuando estamos en desacuerdo que se produce el verdadero aprendizaje.
Seguir haciendo lo mismo de siempre te garantiza llegar al mismo lugar al que hasta ahora has llegado.
El verdadero ciego es aquel que no tiene visión de futuro.
Si ayudas a alguien, estarás siendo la inspiración para que otros hagan lo mismo que tú, entonces terminaremos ayudando a todo el mundo.
La solidaridad es contagiosa, asegúrate de ser un foco diseminador.
El optimista es aquel que guarda para mañana, aún sabiendo que sus días están contados.
Con lo que hagas, podrás marcar una enorme diferencia. La decisión más difícil será determinar qué diferencia es la que quieres marcar.
Solo intentando aquello que consideras imposible es que te darás cuenta de que en realidad tus sueños siempre estuvieron al alcance de tu mano.
Todo aquello que hacemos habla de nosotros mucho más fuerte que aquello que intentamos decir.
Si transitas por el camino de la esperanza y de la confianza en ti mismo, lograrás todo lo que te propongas.
